Respuestas a dos comentarios de Agus Salva sobre el texto "Balance de un desastre político (4)"
Lengua materna. Defiendo el derecho de los ciudadanos a ser atendidos en su lengua materna, siempre y cuando: a) Sea una lengua minoritaria pero no una lengua residual, mucho más si es mayoritaria o casi mayoritaria. b) No vaya en detrimento de la lengua franca. c) No sea un pretexto para imponerla al resto de los hablantes, sobre todo si son mayoría.
No soy partidario de fomentar el espíritu de Babel, sino de fomentar el uso de las lenguas francas. En lo que todo el mundo parece estar de acuerdo en España cuando se trata del inglés, pero no del español.
Respecto a los conciertos económicos. Parto de la asimetría actual respecto a la financiación autonómica, pero soy partidario de paliarla, no de acentuarla. Como soy más bien jacobino e igualitarista, tiendo a considerar que es mejor (para todos, en conjunto) paliar las desigualdades que aumentarlas, mediante las oportunas transferencias desde las zonas ricas hacia las zonas pobres o menos ricas. No comparto el discurso que ampara desigualdades regionales basadas en ventajas geográficas o en la existencia de materias primas, fuentes energéticas o riquezas naturales, presentándolas como atributos de la una identidad colectiva superior, que deben ser disfrutados, en el mejor de los casos, por los naturales de esas regiones, y, en el peor, exclusivamente por ellos.
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