miércoles, 26 de abril de 2017

Gramsci y el PSI


Good morning, Spain, que es different 

“El Partido Socialista italiano no se distingue en nada del Labour Party inglés y no es revolucionario más que en las afirmaciones generales de su programa. Es un conglomerado de partidos; se mueve, inevitablemente, con pereza y retraso; está continuamente expuesto a convertirse en fácil terreno conquistado por aventureros, carreristas, ambiciosos sin seriedad ni capacidad política; por su heterogeneidad, por los roces innumerables de sus engranajes, saboteados y desgastados por tantas siervas dueñas (*), nunca es capaz de asumir el peso y la responsabilidad de las iniciativas y las acciones revolucionarias que le imponen constantemente los acontecimientos. Eso explica la histórica paradoja por la cual, en Italia, son las masas las que empujan y “educan” al partido de la clase obrera y no es el partido el que guía y educa a las masas (…) El Partido Socialista está expuesto a todas las presiones de las masas y se mueve y se diferencia cuando ya las masas se han movido y se han diferenciado. En realidad, este Partido Socialista que se proclama guía y maestro de las masas no es más que un mísero notario que registra las operaciones realizadas espontáneamente por las masas; este pobre Partido Socialista que se proclama jefe de la clase obrera no es más que la impedimenta del ejército proletario”.
L’Ordine Nuovo, 9/X/1920
(*) Gramsci alude a “La serva padrona”, de Pergolesi.
Salvando las distancias y la situación política, pues hoy no se plantean objetivos revolucionarios ni las fábricas están ocupadas por obreros organizados en consejos, el artículo de Gramsci hace pensar en el día de hoy. Y no sólo sobre el PSOE....

No hay comentarios:

Publicar un comentario