Huntington. Choque

Huntington, Samuel (1927-2008)

El choque de civilizaciones y la reconfiguración del orden mundial, primero fue un artículo, en 1993, luego varios seminarios y, en 1996, un libro. Utilizo la edición de Paidós de 2005.

El libro consta de cinco partes, que abordan los siguientes asuntos.

1. Por primera vez en la historia, la política mundial debe hacer frente a varios polos y, a la vez, a varias civilizaciones (occidental, africana, sínica, hindú, islámica, ortodoxa y latino-americana); la modernización económica y social no produce una civilización universal ni una occidentalización en las sociedades no occidentales.

2. La correlación de fuerzas entre civilizaciones está cambiando: Occidente pierde influencia relativa, mientras las civilizaciones asiáticas aumentan su fuerza económica, política y militar, y el Islam experimenta una explosión demográfica y se convierte en una amenaza. Las civilizaciones occidentales no reafirman el valor de sus culturas.

3. Está surgiendo un orden mundial basado en la civilización; las sociedades que comparten afinidades culturales cooperan entre sí; los países se agrupan en torno a los Estados dirigentes de sus civilizaciones. Los esfuerzos por hacer pasar los países de una civilización a otra resultan infructuosos.

4. Las pretensiones universalistas de Occidente chocan con otras civilizaciones y en particular con China y el Islam; en el plano local, las guerras entre musulmanes y no musulmanes generan solidaridades entre países afines.

5. La supervivencia de Occidente depende de que: a) los estadounidenses reafirmen su identidad occidental, y b) de que los occidentales acepten que su civilización es única pero no universal, y de que se unan para preservarla de los ataques de las sociedades no occidentales. Evitar una guerra mundial entre civilizaciones depende de que los líderes mundiales acepten la naturaleza de la política global, con raíces en múltiples civilizaciones, y cooperen para su mantenimiento. 

Respuesta a Joaquim Pisa:
Efectivamente, responde al momento en que, deshecho el bloque soviético, los EE.UU. aspiran a convertirse en la potencia hegemónica mundial, pero con 45 años de retraso. El proyecto "del siglo americano" (un artículo de Henry Luce en la revista Life) surge durante la II guerra mundial, cuando los aliados ven que la victoria de Alemania es imposible y se aprestan a repartirse el mundo cuando la guerra concluya, pero la URSS y los países de su órbita (con el Pacto de Varsovia y el COMECON) lo impiden, por lo que la hegemonía es compartida. Tras la caída del muro berlinés, Bush padre, con la primera guerra del Golfo da paso a lo que llama "el nuevo orden mundial", seguido por su hijo, mucho más imprudente que él, quien aconsejado por los belicosos neocons, lo llevará a sus últimas consecuencias, con los resultados conocidos.