miércoles, 9 de marzo de 2016

Todo es divisible


A propósito de un texto de Luis Roca Jusmet.

Referéndum: quiénes votan ¿los ciudadanos o los territorios? ¿Son los territorios los que se adaptan a los ciudadanos o es al revés? Como los territorios no pueden votar, la pugna siempre es entre ciudadanos que prefieren sentirse de un territorio o de otro. Por tanto la consulta para ser auténticamente democrática deberá permitir que todos los ciudadanos decidan sobre el territorio, no sólo los partidarios de una determinada configuración del territorio, aunque los nacionalistas se erigen como los únicos representantes legítimos para representar a un territorio. 
Lo cual supone admitir que, en una hipotética consulta, puede haber decisiones contradictorias sobre el mismo territorio, por tanto, lo democrático sería que el territorio se repartiera según unas u otras preferencias, siguiendo un principio de aplicación general: todos los territorios son divisibles, según decisión de sus habitantes. 
Por tanto si España es divisible, Cataluña (o el País Vasco) también deberían serlo. Y de la misma manera que los habitantes de una región deciden separarse de su antiguo país, los habitantes de una provincia deberían poder hacer lo mismo respecto al país nuevo al que se les quiere vincular.

No hay comentarios:

Publicar un comentario